La Floreria consiste en un "arreglo floral" (técnica mixta sobre papel de algodón), exhibido en un marco de acrílico hecho a medida (también conocido como jarrón), papeles pintados y objetos a medida (también conocidos como polinizadores).  Dos diseños de papel tapiz son parte del trabajo, uno está diseñado en base al “Toile the Joule” usando fotografías que tomé durante el cierre de 2020, donde el tráfico y la contaminación se redujeron al mínimo, y la ciudad fue tomada por peatones y por familias y niños en sus bicicletas, permitiendo el renacimiento de la naturaleza. El Toile the Joule es un diseño tradicional que suele representar principalmente escenas pastorales. En lugar del campo, estoy usando las imágenes de ciudades sin tráfico (que han sido tomadas por el transporte desde la invención del automóvil) para ilustrar que, con los contaminadores desaparecidos, vuelven a ser un espacio para que la gente disfrute y la naturaleza para renacimiento. Un segundo motivo muestra a los polinizadores en plena acción, ayudando a esparcir las semillas de la vida para crear más belleza. Como todo, son coloridos alegres, amenazantes y peligrosos, como para la mayoría de las cosas, nada es totalmente bueno o totalmente malo (sin considerar los extremos).

 

Las flores son un cuerpo de trabajo que comencé durante el primer encierro en 2020. En ese momento vivía en Londres, una ciudad excesivamente centralizada, contaminada y abarrotada, pero también muy hermosa, llena de historia y eventos. Mientras vivía en el centro, fui testigo del cambio que experimentó la ciudad durante el cierre. Recorrimos la ciudad en bicicleta, sin tráfico, las familias con sus hijos disfrutaban de un lugar que antes era propiedad del automóvil y el transporte público.

La vista de los edificios era magnífica, la falta de publicidad y otros contaminadores permitieron que muy pocos de nosotros fuéramos testigos de su belleza.

 

Ha sido difícil, con altibajos. Pero también estaba el lado bueno, los delfines nadaban de regreso a los canales de Venecia, los niveles de contaminación disminuían y los olores de las flores se volvían más prominentes.  Los oficinistas lograron trabajar desde casa, todas esas horas desperdiciadas transportando en transporte público abarrotado se aprovecharon mejor. Varios abandonaron las grandes ciudades para instalarse en pueblos más pequeños y casas más grandes con áreas verdes, fomentando la descentralización y el crecimiento en otros pueblos olvidados, donde debido a la poca población, no muchos pudieron abrir un negocio allí, un restaurante, una tienda de conveniencia. , un teatro, una galería de arte o lo que tengas en mente ...

 

La florería quiere crear un espacio que le permita volver a visitar la velocidad del tiempo que vivíamos antes, la histeria frenética, la disparidad y desproporcionalidad en la forma en que se dividieron nuestros recursos, la prioridad y admiración, la confianza y las verdaderas necesidades, y más. de todo, tener un hermoso arreglo floral que dure (casi) para siempre.